Poema XX: Poema indigenista a San Andres de Sotavento












POEMA INDIGENISTA
A SAN ANDRES DE SOTAVENTO

Sobre una extensa geografía variada
Prospectada por los siglos hasta hoy,
Habitaban felices, en épocas pasadas
Las tribus de Mexión y Pinchorroy.

Acaso sospecharían, que al despuntar un alba
Entre ruidos de corceles y olor amañanado,
Entrará como dueño el español Villalba,
Y truncará para siempre la paz del cacicazgo.

Y allí en un instante de intromisión y engaño
Se violó la indiana tradición nativa,
La tribu antes libre se convirtió en rebaño
De la audaz y mal oliente comitiva.

Creció el bohío cercado por la cruz y por la espada
Y cuenta la leyenda en boca del anciano
Que los indios musculosos de nuestra tierra amada,
Sudaron sangre generosa, al insular tirano.

Hubo pues, de morir MUSLACO, el joven capitán
De tribus, y los indios en épicos dolores,
Para la historia rubricaron del titán
El grito de su nombre en fúnebres tambores!

¡Rataplán, rataplán. Murió el capitán!

Y si pensaras paisano en la gloriosa gesta
Que con Brígida, sellara nuestra historia,
Sentirías la intensidad de su protesta
Que la reclama el tiempo en honra a su memoria!